5.2. La vida en la selva de los lacandones.
La economía tradicional de los lacandones se basa en la milpa maya, un sistema de agricultura de roza, tumba y quema que configura un mosaico de cultivos, acahuales y selvas que aporta recursos a los lacandones en todas sus fases.
Durante mi visita, se celebra en Lacanjá la “Exposición Cultural Lacandona”, una muestra de las actividades de los lacandones, en la que compruebo que a pesar de que el ecoturismo ha sustituido a la selva como su principal fuente de recursos, los lacandones continúan viviendo en una estrecha conexión con su entorno hasta el punto de que se autodenominan “los guardianes de la selva”.
Todo parece en equilibrio en la selva de los lacandones. ¿Todo? La realidad, como casi siempre, es más compleja. En la Selva Lacandona se desarrolla un largo y duro conflicto focalizado en la tenencia de la tierra. Y para entenderlo, hay que conocer un poco la historia de los diversos grupos de población que en diversas épocas has conseguido asentarse en estas selváticas tierras.
México
Nuestro viaje «Conectando Bosques» nos lleva hasta México. Iniciamos un relato forestal viajero por el sur de México en el que vamos a llegar hasta «La selva de los mayas»
He venido a México para conocer las selvas de los mayas. Esas selvas que esconden los secretos del auge y colapso de la civilización maya clásica. Y quiero conocer a los mayas que aún habitan esas selvas. Quiero conocer a los mayas que habitan la Selva Lacandona de las tierras bajas de Chiapas. Pero antes, quiero visitar algunas de las grandes ciudades mayas de México que un día engulló la selva. Como Chichén Itzá en las selvas de Yucatán o Palenque en las selvas de Chiapas. ¿Me acompañas?
En la Península de Yucatán la selva se abraza con el agua. El agua del mar Caribe, sobre cuyas mismas costas se alzan las ruinas mayas de Tulum y bajo la que se esconden los arrecifes coralinos de la isla de Cozumel. Pero también el agua de los cenotes, esos pozos y cavernas inundados de agua que se distribuyen por miles en las selvas de Yucatán y que posibilitaron el surgimiento de grandes ciudades mayas como Chichén Itzá.
En este viaje vamos a conocer la costa caribeña desde Tulum hasta Cancún, cenotes como el de Ik Kil o el cenote sagrado de Chichén Itzá y por supuesto la selva baja y mediana que se extiende por la parte norte de la Península de Yucatán.
Chichén Itzá es uno de los más espectaculares sitios arqueológicos mayas, hasta el punto de que se ha incluido entre las nuevas Siete Maravillas del Mundo Moderno. Aunque Chichén Itzá ya había sido abandonada a la llegada de los conquistadores, durante la época colonial se mantuvo como el principal destino de peregrinaje de los mayas, que acudían a arrojar ofrendas al cenote Sagrado. Los actuales mayas han conservado parte de la sabiduría de los antiguos pobladores de Chichén Itzá, como el conocimiento tradicional de la Selva Maya, caracterizado por el uso múltiple de muchas de sus especies forestales.
Valladolid es una pequeña ciudad colonial con un ambiente agradable y tranquilo muy diferente al de los grandes centros turísticos de Yucatán como Cancún. En 1847 se iniciaron en Valladolid las primeras revueltas que dieron origen a la Guerra de Castas, un conflicto racial provocado por la situación de pobreza y desigualdad social a la que era sometida la población indígena maya por parte de las élites blanca y criolla.
A principios de los años 70, Cancún era un pequeño pueblo de pescadores en el extremo noreste de la Península de Yucatán. Algo más de 50 años después, en 2022 el aeropuerto de Cancún recibió la friolera de 30 millones de pasajeros. Cancún es el paradigma de un modelo de desarrollo basado en un turismo de sol y playa.
En este relato conoceremos a las civilizaciones que han habitado Yucatán, desde los antiguos mayas y sus grandes ciudades como Chichén Itzá a los actuales turistas y sus grandes infraestructuras como el controvertido proyecto del Tren Maya.
Dicen que las ruinas mayas de Palenque bien merecen por sí solas una visita a Chiapas. Las ruinas de Palenque parece que hubieran sustraído un pedazo de terreno a la selva que las arropa a los pies de la sierra chiapaneca.
Yaxchilán es una antigua ciudad maya que se alza prácticamente oculta sobre un amplio meandro del río Usumacinta. Con un poco de imaginación, en Yaxchilán uno se puede sentir como un viejo maya paseando por su selva, la Selva de los Mayas.
Bonampak conserva los murales más extraordinarios del mundo maya. Los murales relatan la historia de los gobernantes de Bonampak. Son escenas que muestran una civilización en la que los conflictos militares y las guerras debían ser muy habituales.
A través de sitios arqueológicos como Palenque, Yaxchilán y Bonampak he podido conocer la selva de los antiguos mayas. Una selva que guarda el secreto del fin de su civilización.
5.1. Ecoturismo con los lacandones
La Selva Lacandona se caracteriza por la gran diversidad de árboles, que pueden alcanzar hasta los 60 metros de altura y la abundancia de bejucos y plantas epífitas. Son comunes especies como la Caoba (Swietenia macrophylla), el Cedro (Cedrela odorata), la Ceiba (Ceiba pentandra) o el Canxan (Terminalia amazonica).
Tras visitar Bonampak, mi siguiente destino es la comunidad lacandona de Lacanjá Chansayab, a unos pocos kilómetros de distancia de Bonampak y a las puertas de la Selva Lacandona. En los dos próximos días intentaré conocer un poco a los lacandones y a su selva, la Selva Lacandona.
5.2. La vida en la selva de los lacandones
La economía tradicional de los lacandones se basa en la milpa maya, un sistema de agricultura de roza, tumba y quema que configura un mosaico de cultivos, acahuales y selvas que aporta recursos a los lacandones en todas sus fases.
Durante mi visita, se celebra en Lacanjá la “Exposición Cultural Lacandona”, una muestra de las actividades de los lacandones, en la que compruebo que a pesar de que el ecoturismo ha sustituido a la selva como su principal fuente de recursos, los lacandones continúan viviendo en una estrecha conexión con su entorno hasta el punto de que se autodenominan “los guardianes de la selva”.
Todo parece en equilibrio en la selva de los lacandones. ¿Todo? La realidad, como casi siempre, es más compleja. En la Selva Lacandona se desarrolla un largo y duro conflicto focalizado en la tenencia de la tierra. Y para entenderlo, hay que conocer un poco la historia de los diversos grupos de población que en diversas épocas has conseguido asentarse en estas selváticas tierras.
La selva de los mayas (5.1 de 5)
5. La selva de los lacandones.
5.1. Ecoturismo con los lacandones.
La Selva Lacandona se caracteriza por la gran diversidad de árboles, que pueden alcanzar hasta los 60 metros de altura y la abundancia de bejucos y plantas epífitas. Son comunes especies como la Caoba (Swietenia macrophylla), el Cedro (Cedrela odorata), la Ceiba (Ceiba pentandra) o el Canxan (Terminalia amazonica).
Tras visitar Bonampak, mi siguiente destino es la comunidad lacandona de Lacanjá Chansayab, a unos pocos kilómetros de distancia de Bonampak y a las puertas de la Selva Lacandona. En los dos próximos días intentaré conocer un poco a los lacandones y a su selva, la Selva Lacandona.
La selva de los mayas (4 de 5)
4. La selva de los antiguos mayas.
Dicen que las ruinas mayas de Palenque bien merecen por sí solas una visita a Chiapas. Las ruinas de Palenque parece que hubieran sustraído un pedazo de terreno a la selva que las arropa a los pies de la sierra chiapaneca.
Yaxchilán es una antigua ciudad maya que se alza prácticamente oculta sobre un amplio meandro del río Usumacinta. Con un poco de imaginación, en Yaxchilán uno se puede sentir como un viejo maya paseando por su selva, la Selva de los Mayas.
Bonampak conserva los murales más extraordinarios del mundo maya. Los murales relatan la historia de los gobernantes de Bonampak. Son escenas que muestran una civilización en la que los conflictos militares y las guerras debían ser muy habituales.
A través de sitios arqueológicos como Palenque, Yaxchilán y Bonampak he podido conocer la selva de los antiguos mayas. Una selva que guarda el secreto del fin de su civilización.
La selva de los mayas (3 de 5)
3. Las civilizaciones de Yucatán.
En este relato conoceremos a las civilizaciones que han habitado Yucatán, desde los antiguos mayas y sus grandes ciudades como Chichén Itzá a los actuales turistas y sus grandes infraestructuras como el controvertido proyecto del Tren Maya.
La selva de los mayas (2 de 5)
2. Yucatán, entre la selva y el agua.
En la Península de Yucatán la selva se abraza con el agua. El agua del mar Caribe, sobre cuyas mismas costas se alzan las ruinas mayas de Tulum y bajo la que se esconden los arrecifes coralinos de la isla de Cozumel. Pero también el agua de los cenotes, esos pozos y cavernas inundados de agua que se distribuyen por miles en las selvas de Yucatán y que posibilitaron el surgimiento de grandes ciudades mayas como Chichén Itzá.
La selva de los mayas (1 de 5)
1. Un relato forestal viajero por México en 2023.
He venido a México para conocer las selvas de los mayas. Esas selvas que esconden los secretos del auge y colapso de la civilización maya clásica. Y quiero conocer a los mayas que aún habitan esas selvas. Quiero conocer a los mayas que habitan la Selva Lacandona de las tierras bajas de Chiapas. Pero antes, quiero visitar algunas de las grandes ciudades mayas de México que un día engulló la selva. Como Chichén Itzá en las selvas de Yucatán o Palenque en las selvas de Chiapas. ¿Me acompañas?